Por:
Víctor Yépes Flórez
Como ciudadano Colombiano que soy, además de estar orgulloso de ello,
no puedo dejar pasar por alto una fecha tan importante; como cada nueve de
abril en el acontecer nacional, como quiera que repudiamos el asesinato del
Caudillo Jorge Eliecer Gaitán y declaramos legalmente dicha fecha como Día
nacional de las victimas. Todo con el fin de visibilizar, escuchar y recordar
estos fenómenos tan dolorosos, que han desangrado y desagarrado las almas de todos nosotros
durante décadas.
Un 09 de abril de 1948, a la una de la tarde, en la ciudad de Bogotá,
ultimaron la humanidad del caudillo liberal Jorge Eliecer Gaitán Ayala, bien
reconocido como: eximio orador, destacado académico, riguroso Abogado,
carismático, simpatizante de las ideas sociales, pero sobretodo fue un aferrado
defensor de las victimas, fruto de la violencia clasista que preponderaba en
aquella época.
El reconocimiento a su labor política y su masiva acogida popular, se
vio acrecentada cuando éste fungía como Representante a la Cámara y lideró el
control de la investigación a la masacre de las bananeras de la UNITED FRUIT
COMPANY, exterminio que fue a manos del ejercito nacional de Colombia el 6 de
diciembre de 1928 en Ciénaga, Magdalena, contra huelguistas de dicha compañía
que protestaban por sus pésimas condiciones laborales, Gaitán en el Congreso de
la República generó un agudo debate en consideración con la decisión militar de
disparar a una manifestación desarmada donde se encontraban mujeres, ancianos y
niños.
El Caudillo Jorge Eliecer, además de ser recordado en la memoria
colectiva nacional, incluso hasta internacional como un líder propio de las
clases populares, por mencionados hechos también lo reconocemos como un
defensor de las victimas.
En hora buena el Congreso de la Republica Aprobó la ley 1448/2011,
proyecto de iniciativa Liberal que determina el 09 de abril como día nacional
de las Victimas. Esta norma es de trascendencia en el devenir socio-político
nacional, pues determina la calidad de victima y dicta medidas de atención,
asistencia y reparación integral a las víctimas del conflicto armado interno, suceso
necesario para la crisis que vive el país.
A todos indirectamente nos toca la violencia, pero esa situación no nos hace victimas,
victima es aquella persona que sufre un daño como consecuencia de violación a
los Derechos humanos o Derecho internacional
Humanitario (en momento de guerra).
Amigas y amigos, recordemos que las victimas son seres humanos como
todos nosotros, que merecen ser reparadas, saber la verdad de los hechos y si
es el caso restituirle lo que le fue desgarrado, para que de esta manera erradiquemos semillas de odio,
consolidamos una sociedad más solidaria y le demos más credibilidad a las
instituciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario